Ecopsicologia
ecologia espiritual


Religión,
movimientos religiosos
y escuelas religiosas
(conferencia)

La palabra religión se traduce del latín como el acercamiento a Dios, la Unión con Dios o como el Camino hacia tal Unión.

Todos los movimientos religiosos creados por Dios entre las personas fueron formados con este mismo propósito.

No obstante, con el tiempo estos movimientos fueron corrompidos, a veces incluso totalmente, porque el poder en aquellas organizaciones fue tomado por personas primitivas agresivas y egoístas*, y no por practicantes espirituales verdaderos. Así las organizaciones ideadas y creadas por Dios fueron convertidas por la gente en sectas*.

A pesar de esto, en unos u otros países aparecieron nuevos héroes que conocieron al Creador, Le sirvieron abnegadamente y lucharon contra el mal de las perversiones religiosas desarrollándose de esta manera, entre otras.

Los fanáticos de las sectas a menudo se burlaban de ellos y los mataban. No obstante, muchos lograron crear Escuelas espirituales y acercar al Creador tal o cual número de almas puras.

Actualmente también existen y continúan apareciendo líderes religiosos que crean sus propias organizaciones en diferentes países.

Estas organizaciones son muy diferentes y no podemos decir que todas éstas se dirigen en la dirección correcta, a pesar de que sus líderes a menudo afirman que son guiados por Dios y que escuchan y cumplen Sus indicaciones. Pero ¿por qué existen estas grandes diferencias? ¿Cómo llegar a comprenderlo?

Ya hemos discutido que en la sociedad hay personas muy distintas. Entre ellas siempre:

— Predominan las almas encarnadas psicogenéticamente jóvenes.

— Existe un porcentaje, mayor o menor (dependiendo de las tradiciones culturales en un dado entorno social) de personas entregadas a los vicios. Son aquellos que se preparan para el infierno y son los desechos de la Evolución. Como ya hemos dicho, una de las maneras principales de prepararse para el infierno es cultivar dentro de uno mismo los estados emocionales groseros, tales como la animadversión hacia cualquiera, el odio, el enojo, la irritación, etc.; aparte de ellos, se degradan los drogadictos, incluyendo los alcohólicos.

— Existe cierta cantidad de personas mentalmente deficientes de nacimiento. Son, por ejemplo, los que fueron alcohólicos u otros drogadictos en sus vidas pasadas. Tales personas normalmente nacen de padres con destinos desfavorables (creados por ellos mismos).

— Existen personas de nivel intelectual mediano o alto que se dedican, con mayor o menor éxito, a diversas actividades sociales.

— Existen las personas que se encuentran en aquellas etapas del desarrollo de la conciencia en las cuales pueden acercarse realmente a la Divinidad e incluso obtenerla en esta encarnación.

De todo esto depende la religiosidad de las personas.

Por ejemplo, una vez me topé con una secta en la cual sus adeptos desarrollaban intencionalmente la capacidad de odiar de una manera intensa para poder tener el control mágico sobre otras personas.

Otro grupo parecido de «magos» «se recargaba» de la energía infernal en sitios de poder negativos con el mismo propósito.

También existen las sectas y los grupos creados por maníacos sexuales que disfrazan su actividad de pseudoreligiosidad.

Además, hay algunas escuelas de «psicología moderna» que fueron creadas por personas diabólicas, cuya pasión es humillar a los otros y burlarse de ellos. Estos monstruos justifican su actividad diciendo que eliminan el «yo» inferior de sus víctimas a través de sus humillaciones.

Si examinamos el sectarismo de un nivel más «decente», podemos destacar los siguientes errores metodológicos más comunes: tener nociones incorrectas sobre la localización, estructura y funciones de los chakras; prestar atención solamente a los chakras bajos o altos; colorear los chakras según los colores del arco iris; tener conceptos absurdos sobre los métodos de trabajo con la Kundalini, que se localiza, según lo afirman los sectarios, en el coxis; admirar las fantasías astrológicas; comunicarse con los «maestros» de entre los espíritus o «extraterrestres» en lugar del Espíritu Santo y así sucesivamente.

Para pasar de la descripción de los fenómenos negativos que existen en el ambiente pseudoreligioso a los positivos, examinemos qué es lo que debemos desarrollar realmente para acercarnos a la Meta Suprema final:

— Como ya hemos dicho, necesitamos desarrollar el intelecto por todos los medios. También es muy importante acumular tanto conocimiento científico natural como sea posible, ya sea de la medicina, biología, psicología fundamental, etnografía, astronomía y la historia del desarrollo del pensamiento religioso-filosófico. Además, es necesario orientarse bien en la política. Pues el aprendizaje espiritual implica desarrollarse hasta alcanzar la Divinidad, lo que no es posible lograr solamente con los ejercicios meditativos. ¡Debemos tratar de obtener la competencia Divina en todas las cosas más importantes y para esto es preciso ampliar nuestro horizonte al máximo!

— Es esencial aprender a comunicarse armónicamente con la naturaleza. Para aprender a amar al Creador, debemos primero aprender a amar Su Creación con todos sus seres, lo que no es posible hacer en los cuartos, museos o laboratorios, ni tampoco en los templos. En cambio, en medio de los paisajes naturales armoniosos, con la abundancia de manifestaciones diferentes de vida —si el practicante tiene una actitud correcta (amorosa y cuidadosa) hacia ellos— es fácil lograrlo.

— Es imprescindible tener una excelente salud. Pues sin ésta, la pureza y el crecimiento de la conciencia son imposibles. Por eso debemos estudiar y seguir los principios del estilo de vida saludable en lo que concierne a la nutrición, a la tonificación del cuerpo, a la manera correcta de vestirlo y sanarlo de los malestares más comunes.

— Tener habilidades estéticas en la música, el baile, la pintura, la fotografía, etc., será importante a la hora de trabajar en la refinación de la conciencia.

— La fuerza del cuerpo, la que podemos desarrollar a través del trabajo físico y los entrenamientos deportivos, contribuirá a la acumulación del poder de la conciencia refinada. También es bueno saber las técnicas de defensa personal para no ser temeroso e inseguro de sí mismo al encontrarse con los representantes del primitivismo humano. Sin embargo, apasionarse excesivamente por las artes marciales no puede ser considerado como provechoso en el Camino espiritual, ¡pues este Camino es el Camino del Amor, y no de la agresión!

— No se puede obtener éxito en el trabajo espiritual sin adquirir los hábitos de la autorregulación psíquica, que incluye, entre otras cosas, la facultad de relajar el cuerpo y la mente y desplazar la concentración de la conciencia dentro y luego fuera del propio cuerpo (y también dentro de los chakras y meridianos).

— Todo lo anteriormente nombrado es necesario. Sin embargo, lo más importante es desarrollarse como corazón espiritual, que es el órgano del amor cordial. ¡Pues «Dios es Amor»! De esto resulta que para acercarse a Él, uno también debe convertirse en Amor. ¡En otras palabras, debemos acostumbrarnos a no perder el estado de amor incluso hacia aquellos que son hostiles con nosotros, que nos torturan o tratan de matar nuestros cuerpos!

— Además, es fundamental tener los conocimientos correctos sobre Dios, sobre el significado de nuestras vidas y sobre las maneras de realizarlo. El trabajo de cualquier agrupación religiosa será poco eficaz si dentro de sus adeptos no se forma la actitud correcta hacia Dios, la que consiste en considerarlo como el Maestro Principal, Real y Viviente, como la Meta Que debe ser conocida y como el Objeto Central de Amor.

* * *

Para finalizar, examinemos cómo distinguir las profecías verdaderas que vienen de Dios de las bromas y burlas de los habitantes del infierno o de otros espíritus.

Para los discípulos del Creador altamente avanzados esta cuestión no es problemática, puesto que ellos ven con los ojos del corazón a sus Interlocutores y conversan con Ellos fácilmente. Es imposible confundir a los Maestros Divinos, ya que son unas Conciencias grandes y muy sutiles Cuyos colores son opuestos a los de los representantes del infierno: por un lado, blanco-dorado-tierno, por el otro, negro-grosero.

Sin embargo, los místicos principiantes, que no han aprendido todavía a sintonizarse con la sutileza Divina, se confunden muy a menudo.

Entonces, ¿existen criterios para diferenciar la información de este tipo, mientras que uno todavía no puede percibir directamente su fuente? Sí, existen.

Primero, Dios nunca nos va a proponer que realicemos actos que causen daño a alguien.

Segundo, Dios habla sobre cómo acercarse a la Divinidad y cómo ayudar a los demás en esto. En cambio, los diablos y demonios dicen palabras floridas, pero vacías, e inducen a realizar acciones antiéticas y tontas. Dios tampoco hace predicciones, salvo en situaciones particulares, por ejemplo, «Vayan a aquel lugar en aquel día, porque antes va a haber un clima desfavorable».

Además, Dios nunca participa en el cumplimiento de los deseos humanos viciosos como, por ejemplo, el deseo de enriquecerse.

Él apoya sólo aquello que necesita para Su Evolución, mientras que las pasiones de las personas irrazonables son apoyadas por aquellos seres no encarnados que se entregaban a estas mismas pasiones y las conocen muy bien.